Estamos presentando de BUCEA los tres elementos que
componen la fase de BUSCA de la Metodología. Hemos analizado de estos tres
elementos la Voluntad y ahora nos toca analizar la OBSERVACIÓN.
Una vez que la Voluntad ha hecho aparición como ese “querer
querer” comienza un trabajo que requerirá del tercer elemento, la Paciencia,
del que hablaremos más adelante, pero que en si mismo es necesario aclarar, que
es la OBSERVACIÓN.
Todo científico sabe que en la OBSERVACIÓN está la
clave del descubrimiento. Todos cuantos avances científicos conocemos tienen su
origen en la OBSERVACIÓN, incluso los que no se buscaban o son fruto de un
error tiene su origen en la OBSERVACIÓN, alguien estaba observando algo.
La OBSERVACIÓN es un proceso de ATENCIÓN PLENA, es
un fase en la que debemos aprender a poner todos los sentidos en lo que estamos
observando. Dependiendo de lo que observamos la ATENCIÓN PLENA requiere de una
serie de instrumentos. No es lo mismo observar ballenas en alta mar, que pájaros
en los bosques, células en el cuerpo humano o el comportamiento de los seres
vivos en su hábitat. En nuestra OBSERVACIÓN el Que eres tu mismo, somos uno mismo. Somos los observadores y lo observado. Lo primero que nos resulta
chocante es que nos podamos observar a nosotros mismos pues lo observado no
puede ser lo mismo que el observador. Estamos hablando y vamos hablar de la
AUTOBSERVACION.
Acostumbrados a mirar fuera, a estar pendiente de lo
que pasa fuera, la inmensa mayoría de las personas no saben que pueden
observarse a si mismas. Aquí encontramos el primer obstáculo. Esta falta de costumbre
puede generar incredulidad en todos aquellos a los que propongamos una
autobservación consciente. Esta perplejidad y falta de fe en el proceso es
falta de voluntad, por lo que primero, como dijimos con anterioridad es
necesario trabajar la voluntad, el “querer querer” de lo contrario el proceso
no será eficaz al sabotear la mente de continuo el proceso de autobservación.
Por otro lado pese a que podemos ser observadores del
mundo exterior, al que aplicamos nuestros sentidos, podemos encontrarnos con
personas sin ATENCION PLENA, es decir, despistadas. No nos damos cuenta. El
mundo solo es lo que nuestra mente nos dice que es. Perdemos la percepción
plena de la vida porque la mente automatizada en pensamientos rumiantes, loro o
mono (expresiones todas que reflejan una actividad mental llena de pensamientos
sin parar) impide percibir la vida en todo su esplendor, siempre estamos interpretando
y juzgando lo que vemos, oímos, saboreamos, olemos o tocamos. Por ello uno de
los mayores enemigos de la ATENCION PLENA es la mente inquieta, la mente loro,
la mente mono o el pensamiento rumiante, obsesivo y circular. Este tipo de
personas abundan en el mundo, son mayoría.
Solo es posible la AUTOBSERVACION en quietud mental,
primer requisito y se convierte entonces el “aquietamiento mental” en el primer
escollo para comenzar el trabajo de OBSERVACION.
Uno de los primeros ejercicios que practicamos en
BUCEA es MEDITAR. Es la Meditación la práctica más indicada para aprender a
aquietar la mente y comenzar el trabajo de OBSERVACION. Para quienes no han
meditado nunca este ejercicio es básico que se haga de manera paulatina y
gradual, poco a poco.
Existe un camino muy rápido en la actualidad que es
la HIPNOSIS y la AUTOHIPNOSIS sin perder la consciencia. En BUCEA no se emplean
ninguna de estas técnicas. Dejo bien claro que en BUCEA se trata de un camino
lento, puede llevar mucho tiempo en comparación con otras técnicas. Se trata de
hacer el Camino de Santiago en coche o avión o hacerlo andando. Nuestra mente
que pretende siempre un fin busca soluciones rápidas y eficaces para alcanzar
comprensiones que acaben con el dolor o la contracción. Cuando encontramos el
sentido, cuando tomamos conciencia la mente se siente satisfecha, por ello es
atractiva toda metodología que consiga sus fines de manera rápida y eficaz. En
BUCEA trabajamos despacio, por eso el tercer elemento es la PACIENCIA.
BUCEA es una aprendizaje para la vida, no sólo nos
ayuda a sostenernos y pasar a la acción, es una forma de vida, una manera de
Ser y estar en la vida. La decisión de no aplicar hipnosis en BUCEA es que
hemos optado por ir a Santiago andando.
La Meditación de BUCEA es la Meditación Mindfulness.
Es decir, la observación desapegada de pensamientos y sentimientos. Se trata de
observar lo que pensamos y sentimos y, sobre todo, atender al cuerpo, que también
nos manda mensajes, que es quien está en el ahora y es el que nos sostiene en
esta dimensión y al que solo prestamos atención cuando enferma o por estética.
En este punto existe mucha confusión pues se
equipara Meditación con relajación por creencia cultural. En BUCEA meditar es
observar pensamientos y emociones principalmente, pero no sólo con el objetivo
de saber el que pienso y el qué y cómo lo siento. Se trata de entrenar la
observador: La consciencia.
En BUCEA despertamos al observador para que luego
nos acompañe el resto de nuestra vida y nos puede reportar las tomas de
conciencia necesarias para ir evolucionando.
El observador es la clave de la OBSERVACION.
Hay quienes se quedan en la Meditación y no aplican
la metodología en la vida diaria, por lo que esperan con ansia el momento de
meditar para encontrar la serenidad, la paz y la comprensión. En BUCEA el campo
de aplicación es la vida cotidiana, desde que te levantas y hasta que te
acuestas, por eso dispones de un PLAN DE VIDA, del que hablaremos más adelante.
En la tradición cristiana se habla del Ángel de la
Guarda, un ser celestial que te acompaña allá donde vayas y que es tu asistente
en la tierra toda la vida. El Observador no es el Ángel de la Guarda. Es nuestra
capacidad de autobservación.
Darse cuenta
El Pozo
Me levanto una mañana,
Salgo de mi casa,
Hay un pozo en la vereda,
No lo veo,
Y me caigo en él.
Salgo de mi casa,
Hay un pozo en la vereda,
No lo veo,
Y me caigo en él.
Día siguiente…..
Salgo de mi casa,
Me olvido del pozo en la vereda
y vuelvo a caer en él.
Salgo de mi casa,
Me olvido del pozo en la vereda
y vuelvo a caer en él.
Tercer día,
Salgo de mi casa tratando de acordarme
Que hay un pozo en la vereda,
Sin embargo
No lo recuerdo
Y caigo en él.
Salgo de mi casa tratando de acordarme
Que hay un pozo en la vereda,
Sin embargo
No lo recuerdo
Y caigo en él.
Cuarto día,
Salgo de mi casa tratando de acordarme
Del pozo en la vereda,
Lo recuerdo,
Y a pesar de eso,
No veo el pozo
Y caigo en él.
Salgo de mi casa tratando de acordarme
Del pozo en la vereda,
Lo recuerdo,
Y a pesar de eso,
No veo el pozo
Y caigo en él.
Quinto día,
Salgo de mi casa,
Recuerdo que tengo que tener presente
El pozo en la vereda
Y camino mirando el piso,
Y lo veo
Y a pesar de verlo,
Caigo en él.
Salgo de mi casa,
Recuerdo que tengo que tener presente
El pozo en la vereda
Y camino mirando el piso,
Y lo veo
Y a pesar de verlo,
Caigo en él.
Sexto día,
Salgo de mi casa,
Recuerdo el pozo en la vereda,
Voy buscándolo con la vista,
Lo veo,
Intento saltarlo
Pero caigo en él.
Salgo de mi casa,
Recuerdo el pozo en la vereda,
Voy buscándolo con la vista,
Lo veo,
Intento saltarlo
Pero caigo en él.
Séptimo día,
Salgo de mi casa
Veo el pozo,
Tomo carrera,
Salto,
Rozo con las puntas de mis pies el borde del otro lado,
Pero no es suficiente y caigo en él.
Salgo de mi casa
Veo el pozo,
Tomo carrera,
Salto,
Rozo con las puntas de mis pies el borde del otro lado,
Pero no es suficiente y caigo en él.
Octavo día,
Salgo de mi casa,
Veo el pozo,
Tomo carrera,
Salto,
Llego al otro lado!
Me siento tan orgulloso de haberlo conseguido,
Que festejo dando saltos de alegría…
Y al hacerlo,
Caigo otra vez en el pozo.
Salgo de mi casa,
Veo el pozo,
Tomo carrera,
Salto,
Llego al otro lado!
Me siento tan orgulloso de haberlo conseguido,
Que festejo dando saltos de alegría…
Y al hacerlo,
Caigo otra vez en el pozo.
Noveno día,
Salgo de mi casa,
Veo el pozo,
Tomo carrera,
Lo salto
Y sigo camino.
Salgo de mi casa,
Veo el pozo,
Tomo carrera,
Lo salto
Y sigo camino.
Décimo día,
Me doy cuenta
Recién hoy
Que es más cómodo
Caminar…,
Por la vereda de enfrente.
Me doy cuenta
Recién hoy
Que es más cómodo
Caminar…,
Por la vereda de enfrente.
Jorge Bucay
OBSERVAR lleva consigo “DARSE CUENTA”, tomar
conciencia. Es el camino que nos reporta más información de nuestros patrones
mentales, de nuestros automatismos, de nuestra “manera de ser”, como decimos en
occidente.
La OBSERVACION constante, permanente, sostenida ha
llevado a perfeccionar técnicas de Meditación y Contemplación. La OBSERVACION
perfeccionada nos lleva a la CONTEMPLACION por medio de la Meditación. Nos convertimos
en CONTEMPLATIVOS.
BUCEA consigue crear personas CONTEMPLATIVAS. La vida
contemplativa ha estado en España, sobre todo, muy ligada a congregaciones
religiosas católicas. Nuestra mente lo asocia rápidamente con frailes, monjas,
monjes, conventos y clausura. Nada exclusivo de occidente pues en oriente también
encontramos enclaustramientos voluntarios en monasterios.
BUCEA pretende que en el mundo, en lo cotidiano, en
lo ordinario, podamos gozar de los beneficios que disfrutan los monjes
carmelitas o budistas. De esa paz y serenidad que empapa su vida monacal. De hecho
BUCEA se basa en aplicar las técnicas que los estudiosos de estas personas han
concluido como el camino para alcanzar estas cotas de bienestar.
Richard Davidson, psicólogo en la Universidad de Wisconsin, en
un estudio reciente descubrió que los
meditadores novatos estimularon sus sistemas límbicos, la red emocional del
cerebro, durante la práctica de meditación de compasión, una antigua práctica
del budismo tibetano. Pero el estudio también descubrió que los meditadores
expertos (monjes con más de 10,000 horas de práctica) mostraron una actividad
significativamente mayor de su sistema límbico. Los monjes parecían haber
cambiado permanentemente sus cerebros para ser más empáticos. A principios de
los 90, un investigador de la Universidad de Pensilvania, Andrew Newberg, dijo
que los escaneos cerebrales de los meditadores con experiencia mostraban que la
corteza prefrontal, la zona del cerebro que alberga la atención, tenía un mayor
desempeño durante la meditación, mientras que la región cerebral que se
concentra en la orientación de tiempo y espacio, llamada lóbulo parietal superior,
se oscurecía. Newberg dijo que sus hallazgos explican por qué los meditadores
son capaces de concentrarse intensamente al mismo tiempo que describen
sentimientos de trascendencia durante esa práctica.
El dalái lama organizó el viaje
de monjes tibetanos a universidades estadounidenses para que fueran estudiados
mediante escaneos, y habló en la reunión anual de la Sociedad de Neurociencia,
la reunión más grande entre científicos que estudian el cerebro. El da
BUCEA busca, si, BUSCA, que podamos alcanzar un nivel de CONTEMPLACION
del mundo suficiente, pero esa es otra etapa de la metodología, pues recordemos
que estamos en la OBSERVACION de la fase de BUSCA, que luego vendrá CONTEMPLA,
EMPATIZA y ACTUA, pues recordemos que BUCEA es una metodología para pasar a la
acción, para tomar decisiones, para seguir caminando SIEMPRE ADELANTE.
[i] Extracto de http://informe21.com/meditacion/meditacion-puede-cambiar-tu-cerebro-neurocientificos-asi-creen
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